una noche más y solo quiero sentarme a llorar como antes cuando no te tenía, como ahora que aún no te tengo... pareciera ser que no voy a tenerte nunca, y no es que no lo supiera, es que por estos días perdí las esperanzas y de a poco empiezo a entenderlo...
no perteneces a mí, ni a nadie -ni lo vas a hacer-.
con los ojos cerrados te busco y entre gota y gota te llamo. ojalá hubiera más respuesta que mis propios suspiros...

por ahora acá me quedo, esperándote en donde nunca viniste.