me pregunto por vos... por tus alegrías, y por tus temores. por tus problemas, por tus caídas, me pregunto si extrañas la mano que te tendía para levantarte.
¿hace ya cuánto que no nos vemos? ¿4, 5 meses desde ese último encuentro, donde el alcohol te llevó a hablar irracionalmente, y la múscia no me dejaba escucharte?
cada vez te recuerdo menos. reprimo lo que me queda de vos para que el presente se haga más llevadero, para que mi vida no parezca tan vacía. no volvieron a haber besos tan verdaderos como los tuyos.
cada vez me parezco más a la que no quería ser estando con vos. me encuentro disfrutando cosas que vos disfrutabas, y yo me negaba a aceptar como mías. me encuentro reconociendo en mí necesidades que vos necesitabas, y ahora te entiendo un poco más. pienso qué diferente hubiese sido todo si me hubiera dejado domesticar por tu amor. pero no fue. siempre tuve una necesidad injustificada de revelarme a todo, sin importar qué fuera.
el tiempo no vuelve. y pensándolo bien, no quiero que vuelva. me gusta la que soy hoy, me gusta en lo que me convertí. sigo siendo un poco la que era, pero aprendí cosas en el camino que me hicieron crecer un poco, ablandaron mi orgullo, y endurecieron mi corazón. creo que te gustaría volver a conocerme. yo sé que a mí me gustaría conocer tu nuevo vos.
me gusta pensar que el destino nos tiene preparada alguna sorpresa, algún encuentro que haga temblar el suelo bajo mis pies, y me de cuenta de que seguís siendo para mí.