te extraño desde la primera noche que te vi hace cuatro años, y mucho más desde la última noche que te vi, hace dos meses.
creo que nunca voy a dejar de extrañarte, aunque suene exagerado, es por ser fatalista.
y no sos solo vos, sino vos conmigo, y yo con vos.
extraño que mi risa suene dulce y complaciente, que mis ojos brillen de felicidad, que mi sonrisa sea plean y real, y no fingida.
extraño que con un roce cada centímetro de mi cuerpo sienta cosquillas y se me ponga la piel de gallina, y también la ansiedad incontrolable antes de poder verte.
extraño ese tiempo en que el amor significaba alegría.
extraño esos días juntos, cuando el amor no dolía.