ojalá sea cierto para vos, porque lo es para mí...
porque es verdad cuando te digo que si miro desde tus ojos todo se tiñe con un leve resplandor, y brilla un poco más... porque cuando camino de tu mano por algún motivo mi cuerpo es más liviano, y la gravedad hace menos efecto sobre mi, y vuelo en poco... porque es más cómodo dormir sobre tu pecho, que sobre mi colchón frío...
me acostumbré a tenerte.
los días que no te veo, te extraño tanto que duele...
quedate a mi lado.
nunca me faltes.

sabiendo que ya no sé del destino de tus besos,
me pregunto si alguna vez pensaste en volver...
a veces todavía me acuerdo de las horas gastadas mirando juntos el techo,
y la escarcha que se depositaba sobre mi auto, o tu auto mientras estábamos juntos hasta la madrugada.
el tiempo es otro, y se mueve más rápido.
no pienso en vos, ni en mi cuando estaba con vos, ni en lo que te convertías cuando estabas conmigo.
nunca rompimos promesas porque nunca prometimos nada,
y hoy cuando te veo, todavía te saludo, y te sonrío...

el cigarrillo no calmaba la ansiedad, y el alcohol no hacía callar esa voz interna. la noche era más oscura con el paso de las horas y su pulso era cada vez más débil. no había mucho más por hacer, se sentía vencida y derrotada. ya no tenía fuerzas, ni esperanzas, ni ganas. cada nota que salía del reproductor era como una puntada en su corazón. la soledad terminó por enloquecerla. empezó a confundir formas y colores... sin saber cómo se imaginó cerca del océnano. lo veía muy nítido, era de ese azul profundo; ni verde, ni celeste, ni turquesa, era azul. las olas la invitaban, y ella se dejó caer sobre él...
las cortinas en su cuarto ondeaban con el viento frío de la noche, la ventana permaneció abierta, el cigarrillo se terminó por consumir solo apoyado en el cenicero, los hielos en el vaso se hicieron agua, y se mezclaron con el whisky... visto desde arriba, su cuerpo parecía una figurita de contorno colorado pegada al pavimento.

vuelvo a caer.
el lado oscuro me llama,
y hago un esfurzo para no avanzar.
nunca fue la solución,
pero siempre me calmó.
lo haría,
pero tendría que dar demasiadas explicaciones.
es difícil ocultarlo.

fue como tenía que ser,
no como yo quería que fuera...
después de todo, nunca encajé en el papel
de diosa de hollywood de los años 60
andando en un descapotable rojo
y con el pelo volvando perfectamente desordenado al viento,
aunque me gustaba creer que sí.
en cambio,
pareciera que soy la actriz secundaria
la que es sombra,
la que se sienta a un costado con un vestido feo...
y así se me pasa el tiempo,
viéndolo todo con los ojos soñadores de quien no alcanza...

es culpa del frío
de la oscuridad
de lo poco que iluminan las estrellas
y de que la luna esta noche no está...
es culpa del tiempo
del recuerdo huérfano que me persigue
de la hora que no puede frenarse,
del reloj que no puede vovler atrás...
es culpa de la cotidaneidad,
de que uno se acostumbra a ciertas presencias
de que algunas ausencias jamás pasan desapercibidas,
de que algunas personas son imprescindibles...
es culpa de mi cama que es measiado grande para mí sola,
de los ecos del recuerdo,
del hueco en mi costado izquierdo,
de la lágrima fácil...
es culpa del mundo que es injusto,
de las paradojas,
de la ironía que a veces quiere ser protagonista,
de la mala suerte con que fui maldecida...
no te tengo, pero te pienso y te recuerdo,
te quiero y te siento...
no importa que busques excusas,
por culpa mía
vos ya no estás...

no debería
pero la noche me acecha,
y si no te escribo lloro...
con la ansiedad reprimida y el insomnio que se hace cada vez más grande
comienzo a pensarte y recuerdo tu sonrisa que inventaba primaveras donde no las había, y tus ojos que cantaban canciones que yo nunca conocería...
recuerdo tu pelo desprolijo y desordenado, y las palabras que en secreto nos susurraba la noche para convencernos de mantenernos abrazados...
me acuerdo del miedo de perderte, y del dolor cada vez que tenía que dejarte, de la incertidumbre de no saber si esa sería la última vez, o si tal vez volverías a necesitar de mi compañia...
si pudiera, volvería el tiempo atrás, para decirle a la que era que no te deje ir, que por más que lo intente, nunca va a olvidarte...

te veo que entras y aún desde lejos logro reconocer tu sonrisa torcida y tu gesto de querer estar en cualquier otra parte. no sé muy bien a qué viniste, y tus intenciones se me figuran idescifrables porque tu espontaneidad arruina cualquiera de mis predicciones.
como si fuéramos viejos amigos y ya no doliera, empezamos a reirnos del pasado... tus preguntas indiferentes esconden tu curiosidad real, mis respuestan tienen un dejo de tristeza...
te miente mi sonrisa, y mi mirada, disimulo lo que pasa para que la noche valga la pena, porque sé que la mañana va a dejar mucho que desear...
entre copas tu mano se deposita en la parte baja de mi espalda, y me susurras cualquier cosa como excusa para rozar tus labios con mi oido sabiendo que esa es mi debilidad...
vuelvo a quererte sin hacerlo, y soy tuya, una vez más

lo sabía, pero no quería saberlo.
se hizo la desentendida, y miró para otro lado.
cuando volvió a buscarla ella volvió a bersarlo
como si todo aquello nunca hubiera pasado...
con ese beso ella quebró la pasión y el deseó,
con ese beso, de una vez y para siempre, lo olvidó...
mientras, él se derretía en sus suspiros,
la recorría con sus manos y pensó que esta vez era distinto...
mientras ella lo olvidaba,
él se enamoró

no te vayas, no es tu hora
te prometo que no es el sol lo que entra por la ventana...
dejame que la cierre,
que la noche siga intacta entre las paredes de mi cuarto.
dejame secuestrarte, convencerte,
volver a amarte.
volve a tocarme, hay lugares que todavía no alcanzaste,
mirame y recordame,
por si no logro convencerte de quedarte...
absorbeme, abrazame,
hoy soy tuya como nunca antes.
sólo depende de vos y de mí
y de que hoy formemos un nosotros...
quedate, que voy a simular la noche por unas horas
hasta que el sol se canse de intentarlo...

es divertido hasta que duele
hasta que las lágrimas se escurren sin permiso
y el recuerdo de vos y ella me quiebra el corazon...
es divertido hasta que admito que me gustas un poco mas de lo que deberías
hasta que me doy cuenta de que inminentemente nunca vas a ser mio
y siempre voy a ser una mas para vos...
es divertido hasta que deja de serlo
hasta que la noche termina
y yo estoy sola, y sin vos...

BASTA PARA MI,
PARA TU AMOR,
FUE SUFICIENTE!

mi memoria selectiva se olvida,
y vuelvo a creer en tus ojos,
y vuelvo a perderme en tus besos,
y vuelvo a escuchar tus palabras...
entonces me encuentro una noche mas perdida en tu juego,
esperando expectante una reacción o una respuesta que no tiene ni lugar para nacer...
y me voy odiando la vida,
y odiando el mundo...
y llego odiándote por mentirme de nuevo,
y odiandome por volver a creerte...
pero ya no...
no mas...
este es mi recordatorio,
de esta NO ME OLVIDO!

ni tu mirada,
ni tus ojos que no son míos,
ni tus manos,
ni tus caricias,
ni tus abrazos rompehuesos,
ni tus palabras que son mentiras,
ni tu besos,
ni el calor que me das con tus besos,
ni tu nombre,
ni tu recuerdo...
me canse!
de vos ya no quiero tener nada!

se miraron
sus ojos en dos segundos se dijeron todo eso que siempre habían callado
el tiempo había sido mucho
y la distancia era más grande que su amor,
aunque físicamente casi no había espacio entr ellos.
dicen que nunca es tarde,
pero lo era.
ella estaba cansada,
el se había gastado.
cuando se abrazaron no sintieron romperse sus huesos,
cuando se besaron ya no tenían gusto a caramelo,
cuando se acariciaron no les vibró el cuerpo...
qué podían hacer ahora que ella no era ella, y él era un despojo de su pasado?
qué podían hacer ahora que lo único vivo que quedaba en cada uno era un destello en sus ojos?
el amor seguía ahi, o el recuerdo del amor, o las ganas de amar, o la necesidad de darse lo que nunca pudieron... no sabían muy bien qué, pero algo había.
entonces él entendió, tomó un sobro de su café (aunque no mencioné que estaban en un bar) y sonrió...
ella lo miró para alcanzar su pensamiento...
está vez la que se iba era ella...
tuvo miedo, se fue con una lágrima que no dejo nacer, y todos sus recuerdos.

te pegaste.
te adheriste a mi recuerdo, llevo tu piel sobre la mía, tu imagen está grabada en la parte interna de mi párpado.
cierro los ojos, y te veo...
pienso, y tu veo...
duermo, te sueño, y te veo..
me sacudo, no puedo sacarte...
estas, sin haber estado nunca estar
sin querer estar, estas...
y no entiendo, y me erizo, y me encrespo y me enojo
pero no salís, no te saco.
seguís ahi...
y decis que queres todo, aunque a lo mejor no me lo decis a mi
y yo me estoy imaginando soles donde no los hay
o a lo mejor si...
y yo también quiero todo
pero no sé si sabrías manejarlo...
aunque sí sé, y sé que no sabrías...
pero necesito darte el beneficio de la duda