Agradezco tenerlas. Para bien o para mal. Tener por que brindar. Tener historias, anécdotas, recuerdos, y por sobretodo sueños. Poder proyectar con ellas también
 Ansiar que llegue el día de mañana, y saber que todo va a ser menos difícil porque van a estar conmigo, porque no importa lo que se me presente, no voy a estar sola.
Y seguir, y remar y no bajar los brazos.
Sobretodo agradezco no bajar los brazos

No vales nada, o tal vez si, tal vez lo vales todo. Tal vez vales mi vida, mi presente y mi futuro. Porque mi pasado ya fue tuyo. Pero nunca podría saberlo porque cada vez que me lo pregunto, terminas por arruinarlo, con tu orgullo, con tu indiferencia.
Y haces temblar mi mundo, por esos instantes en los que me ignoras, y al final me haces creer que no vales nada.
O tal vez si, no podría saberlo.

Tu indiferencia siempre mostrando tu verdadera cara

Volví a sonarte, como siempre, como desde hace años. Y en el sueño todo es como nunca pudo haber sido aunque evoca algunos recuerdos de como fue.
Y hoy no estas, como nunca estuviste; y somos los mismos que nunca fuimos sin embargo 15 años después seguís paseandote indiferente por los rincones de mi mente y que triste se ve todo desde acá.

Todo lo que siempre quise escuchar, y más.
Y más.
Todo desde esa forma de ser tuya y única.
Y mi perfume inundaba tu aire.
Te dije que tenía frío, y te di de a una mano por vez, mientras con la otra sostenía el vaso casi vacío.
Yo pretendía una cotidianeidad que vos te empeñabas en desbaratar. Te hablaba de todo, de la vida; de nada. Y vos, querías saber más, "algo del corazón" me dijiste. Te dije que todo lo que decía, era del corazón. Como siempre, no me creíste.
Y ahí estábamos, aturdidos, confundidos, alucinados.
No pregunté ninguna de todas esas cosas de las que en realidad no quería saber las respuestas. Vos insistías en querer decirme que yo era el amor de tu vida.
Vos también sos el amor de mi vida. Un amor eterno y pasado, el amor de mi vida de una vida que ya no elijo. Pero permanece, intacta, intocable, inalcanzable, en ese universo paralelo donde sí nos animamos a todo, cuando todavía había tiempo.
Así que gracias, me encanta saber que yo soy el amor de tu vida, en cualquiera de tus vidas