Extraño leer. Suena raro decir eso. Pero extraño leer. Ese momento tan íntimo y simple como es acurrucarse con una manta, una raza de chocolatada y un buen libro en el cual pueda perderme por horas. Extraño esas horas de ocio que antes solía dedicarle. Ya voy a recuperarlas, me digo, ya me voy a hacer el tiempo para elegir un buen libro, elegir una buena excusa, apagar todo y perderme en esos universos paralelos infinitamente más agradables que este, donde todo te aturde y te absorbe.

que no estes acá no es más que una posibilidad de aprender una nueva manera de amarte.

amarte en los kilómetros y en los recuerdos. en la las noches a destiempo, en mis sueños mientras vos amaneces; a través de cables y de espacios que no vemos.
es una oportunidad de aprender que en realidad, estar lejos no es la distancia, sino los silencios, las ausencias; y que entonces nosotros no estamos tan lejos porque nos acompañamos. yo igual te extraño.
que lo que no te mata, te fortalece; dicen...
pero nosotros ya desde antes éramos indestructibles.

fue como si de golpe el verano estallara en un millón de pedazos, y todo lo que nos quedó fue este otoño.
vos tuviste que irte lejos, a donde no puedo alcanzarte.
yo igual te busco, todos los días, todas las noches; y te espero.
lo que más duele es encontrarme haciendo sin vos, esas cosas que siempre hacemos juntos.
me siento tan sola: ninguna compañía se parece a la tuya.
quisiera no haberte soltado nunca.
no puedo evitar pensar en vos cada hora, de cada día.
te extraño tanto que me duele el corazón, la piel y las manos.
perdón, vos debes estar durmiendo y yo acá pensándote, intentando despertarte, llamarte, traerte de vuelta;
soñarte.
ojalá estuvieras acá.
te amo.
buenas noche.
buenos días.

lo sabemos muy bien.
vos allá, y yo acá.
acá el frío se adelanta, allá no quiere irse.
los dos dormimos lejos del abrazo que debería abrigarnos;
y a destiempo.
no me acostumbro al silencio que me aturde por las noches,
a los días de 57 horas,
a los 12 km de todos los días que se transformaron en 12.000.
extraño poder tocarte, reírme a carcajadas, tus manos, tus besos, tus miradas.
no importa, porque el tiempo viene y se va,
y pronto nos vamos a dar cuenta de que ya no hay distancia,
y vas a estar parado en la puerta de mi casa, como un día cualquiera,
como si nada,
y vas a entrar, vamos a mirar una peli acurrucados, y no va a hacer falta decir ni una palabra.
vas a volver, nos vamos a abrazar, y va a ser como si nunca te hubieras ido.

te amo por todo lo que sos, y por lo que no. porque estás al otro lado del mundo, y yo te siento acá, al lado mío. porque nunca faltas, ni faltarías. te amo por tus manos ásperas, rugosas, lastimadas que me dan las caricias más suaves que nunca recibí, y por tus ojos únicos y perfectos que te hacen especial y mío. te amo por tu honestidad brutal, y porque no podés disimular. porque llegaste a mi vida y nunca te fuiste. te amo por todas las veces que nos cruzamos sin saberlo, y por todas las otras vidas que ya vivimos juntos. te amo por lo que pasamos, y por todo lo que va a venir. porque no creo que haya nada que nos pueda pasar que nos rompa. porque tu pecho tiene el lugar perfecto para que yo me duerma, y tus abrazos son la mejor forma de mantenerme cálida y segura. te amo porque no hay porvenir sin vos.

acomodé mis cosas, levanté la vista, y volví a mirarte, buscando que me vuelvas a mirar vos también. "vos bien?" te pregunté. me sonreíste y dijiste que si; no había lugar para otra respuesta. me fui. 

me escondí, y lloré por lo que fue y no, por lo que pudo haber sido, por lo que nunca será. por las veces que te busqué y aún contra todo pronóstico, te encontré. por los años que hace que ya no te busco. por las noches que te pedí que fueras y no fuiste, pero las veces que sí estuviste ahí. 
lloré por mí, porque no voy a tenerte. por vos, porque vas a ser normal a los ojos de todos los demás, porque nadie te va a mirar como yo.

la alegría de elegirte, y que me elijas.

ese don que tenés de hacerme sentir vulnerable e invencible mientras me acurruco en tu abrazo es lo que amo. querer que me cuides, y a su vez hacer todo para cuidarte. saberme débil ante vos, y valiente ante cualquiera que se nos enfrente. sentir que desde que estás conmigo no hay tiempo, solo eternidad. la simpleza de tu compañía, y la importancia de la misma. vos.

más que tu boca, amo tus besos.
más que tus besos, amo tu mirada.
más que tu mirada amo tus manos y la eternidad de tus caricias.
más que todo, te amo.

esa sensación de querer que el resto de tu vida empiece ya,
y no poder tomar la determinación de hacerlo.

que desilusión tan grande, que sensación de vacío.
cuántas horas que ahora parecen perdidas.
cuántas cosas desearía haber callado.
cuánto amor malgastado.
peor que cuando un hombre te rompe el corazón,
es cuando te lo rompe una amiga.

necesito más amigos de todos los días, y menos amigos de fin de semana. más amigos de los que pasan a visitar sin avisar, y menos de los que para verlos tengo que programar con una semana de anticipación. necesito más amigos de los que me hacen reír, y menos amigos de los que me hacen preguntarme qué hice mal. necesito menos amigos de los que llaman para decir feliz cumpleaños, y más amigos de los que saben los nombres de mis papás. necesito más amigos que sean para siempre.